A veces no hace falta salir fuera de nuestro entorno y conocer las miles de historias que han forjado a muchas generaciones. Mallorca no es una excepción porque muchas veces buscamos lugares especiales que están fuera de la isla pero aquí los hay muy bonitos y con historias dignas de escribir un libro. Además, a todo ello podemos añadir que a estos lugares se respira mucha tranquilidad y una espiritualidad es el denominador común de estos lugares.
Nosotros desde www.revistaplural.es queremos ejercer como guías y para ello, nos servimos de algunas herramientas tan simples como los conocimientos sobre historia pero también el libro del director del programa de Radio Balear: La Realidad Oculta, José Maria Ibáñez: “La Vuelta A Mallorca en Ochenta Rutas”
Acerquémonos al municipio de Campanet pero antes de visitar la Ermita de Sant Miquel, nos dirigiremos no muy cerca de allí, ya que en sus proximidades se encuentra Ses Fonts Ufanes que cuando llueve el acuífero que recoge el agua que procede del Puig Tomir y el elemento liquido brota de la tierra, recorre el bosque y desemboca en el Torrent de Sant Miquel.
La Ermita de Sant Miquel es un lugar precioso, que invita a la reflexión interior porque la espiritualidad del lugar nos lleva a ello y también nos permite conocer una historia de amor “inmortal” que nos invita a creer en el amor verdadero.
El oratorio está dedicado al Arcángel San Miguel y junto a ella hay una pequeña explanada donde se encuentra la casa en la que vivía el “Donat”[1] que en la actualidad es un pequeño bar donde poder merendar o tener una breve conversación.
La construcción del oratorio tuvo lugar dentro del contexto de la repoblación de Mallorca tras la conquista llevada a cabo por el rey Jaime I de Aragón en 1229. En 1285, se han documentado que en Mallorca ya había 28 pueblos que se habían constituido alrededor de una parroquia que se había convertido en el eje vertebrador de la comunidad. De hecho, las parroquias habían asumido funciones no solamente religiosas sino también administrativas y políticas. A modo de anécdota, hay que indicar que algunas investigaciones recientes han indicado que la ermita de Sant Miquel fue un lugar que tuvo presencia de los Caballeros del Temple.
También sabemos que la Ermita de Sant Miquel forma parte de las conocidas como “Esglésies del Repoblament” y la más antigua que hay documentada en Mallorca es la antigua Parroquia de Sant Pere en Escorca que data de 1245; el oratorio de Sant Miquel aparece documentado en una bula emitida por el Papa Inocencio VI en 1248.
El templo está conformado por una nave de tres tramos y dividido en dos arcos, junto a la entrada hay una escalera que nos lleva hasta el campanario. En el presbiterio nos encontramos un bello retablo que preside el santo patrón donde podemos ver al Arcángel San Miguel vestido de caballero, llevando en una mano un escudo y en la otra una lanza que clava sobre una figura demoniaca.
Al lado del templo hay un coqueto cementerio y que se utilizó como camposanto del municipio desde sus orígenes hasta 1927 cuando se construyó el cementerio municipal.
Es un cementerio con muchas tumbas situadas en la tierra y entre ellas hay una historia de amor inmortal pero no tuvo un final… feliz.
Nos trasladamos a la Mallorca del siglo XIX, concretamente, a Campanet. Allí un suceso terrible había tenido lugar en la iglesia parroquial, ya que se había derrumbado el coro y se había producido una víctima; una chica llamada Isabel Pons que había fallecido. Su chico, Matías Pujades estaba muy enamorado de ella, le hizo esculpir una lápida y cada día se acercaba hasta la tumba para dejarle un ramo de rosas rojas. Sin embargo, él no pudo superar la pérdida de su chica y un día a las afueras del pueblo se ahorcó colgándose de un árbol; su cuerpo fue enterrado fuera del camposanto en una tumba anónima.
La historia toma tintes que traspasan “la línea que separa la realidad y la fantasía” y que bien podría servir de guion para una película. Resulta que cada día 1 de noviembre, coincidiendo con la festividad de Todos los Santos y en la que la gente acude a dejar una flor a sus seres queridos; en la tumba de Isabel siempre ese día aparece una rosa roja.
Por último, os invitamos a visitar este lugar de Mallorca que seguro que os invita a conocer nuestra historia pero también otra historia que ha pasado de generación en generación.
Para más información:
Casesnoves, Miguel Ángel. Història de les Illes Balears. Palma de Mallorca : Moll, 2008.
Ibáñez, José Maria. «Acércate al oratorio de Sant Miquel de Campanet y que te cuenten la trágica hsitoria de amor de Isabel y Matias. .» En LA VUELTA A MALLORCA EN 80 RUTAS, de José Maria. Ibáñez, 39-40. Madrid: Ánima Ignis. , 2021.
Ibáñez, José María. La Vuelta a Mallorca en 80 Rutas. Palma de Mallorca: Anima Ignis., 2017.
Rosselló Vaquer, Ramón, y Antoni. López Pons. «Historia de Campanet: De la Prehistoria al Siglo XVI.» En Gran Enciclopedia de Mallorca. Volumen 3. Palma. , 1982.
[1] Donado: Persona que se encarga de forma altruista de la conservación de un monasterio.
Foto portada: Juan Ramón Pons.
Texto: Juan Ramón Pons: Graduado en Historia por la UIB.
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