En enero desde China un virus desconocido se fue expandiendo por todos los rincones del mundo causando una gran cantidad de contagios y fallecimientos con mucha rapidez por todo el mundo. La OMS lo calificó de Pandemia Global y muchos comenzaron a compararlo con otras enfermedades pandémicas que a lo largo de los años han hecho mucho daño, pero a las que se les pudo hacer frente como la Gripe de 1918 o la Peste de 1348.
Son más de 2 millones de personas las que han sido contagiadas por el Covid—19 en todo el mundo y España ha sido uno de los países que más fuerte ha sido castigado por la pandemia con 224.000 casos que han sido confirmados de los cuales 22.000 personas han fallecido mientras que hay 95.000 personas que han superado la enfermedad.
Las autoridades españoles decretaron el pasado 14 de marzo el Estado de Alarma y el confinamiento de la población para poder detener el virus generando un parón en la economía mundial. España y las Islas Baleares no han quedado ajenas a esta situación porque el Estado de Alarma, así como la pandemia ha supuesto un parón en la principal fuente generadora de riqueza que se genera en nuestras Islas como es el turismo. Además, hay que tener en cuenta que la mayor parte de los negocios que se sustentan alrededor del sector turístico ya habían empezado los preparativos de una temporada alta que apuntaba buenas perspectivas para el sector pero que la pandemia ha detenido en seco con lo cual se desconoce cuándo podrán las empresas.
No todo son malas noticias las que rodean al Covid—19 sino que hay muchas lecciones que podemos extraer como disfrutar de nuestras amistades, nuestra familia y, sobre todo, consumir producto local. En este sentido, no hay que olvidar que el Estado de Alarma no obligó a parar a los servicios esenciales como: Limpieza, seguridad, sanidad, supermercados, papelerías, estancos, gasolineras, medios de comunicación y transportes. Ellos en este momento son quienes se han mantenido al pie del cañón para ayudar a nuestra sociedad a luchar contra el Coronavirus y no hay que olvidar a la población que desde el primer momento se ha mostrado muy concienciada en el hecho de quedarse en casa, ya que así, es como se le puede ganar al virus.
Una de las grandes lecciones que nos deja el Covid—19 es sin lugar a duda la solidaridad que se ha disparado en muchos lugares del mundo con quienes no pueden salir y, sobre todo, con quienes están en la primera batalla de esta guerra que está llevando a cabo contra el virus. Esos instantes que dedicamos para aplaudirles es un momento es muy especial porque es una forma de agradecerles a todos y sin ninguna excepción todo lo que han hecho por nosotros. Tampoco podemos olvidar a los valientes que han ido superando el Covid—19 porque también hay que felicitar a todas a aquellas personas que se han recuperado gracias a la labor de los sanitarios.
Por último, lo que está claro es que esta pandemia global nos ha hecho plantearnos muchas cosas de nuestras vidas, pero quizás nos haya hecho valorar muchas cosas que antes de que la enfermedad golpease a nuestra sociedad. También podemos extraer otra conclusión positiva que no es otra que el Covid—19 ha sacado lo mejor de una sociedad y que trabajando todos juntos podemos hacer grandes cosas. Sin embargo, no hay que olvidarnos tampoco de la gente que ha sido una irresponsable al no incumplir el confinamiento establecido por las autoridades o simplemente siguiendo las pautas que se nos han ido marcando.
Para terminar, no estaría de mas que las autoridades correspondientes sean capaces de organizar un buen homenaje de todos para quienes han estado en primera línea luchando contra el Covid—19 y muy especialmente, recordar a quienes no han podido superar la enfermedad.
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