El 14 de julio es un día marcado en para aquellos que defienden la libertad individual pero también para quienes celebran esta fecha como símbolo de la cohesión de un colectivo como nación que lucha como nación y donde la libertad es el mayor anhelo.
Nos trasladamos hasta Paris durante la Revolución Francesa cuando el pueblo parisino tomó la fortaleza de La Bastilla y esta fecha 14 de julio de 1789 está considerada como el símbolo del fin del Antiguo Régimen cuyos máximos exponentes eran la Monarquía Absoluta en Francia. Un acontecimiento que traspasó las fronteras francesas y desde allí al resto de Europa e incluso la Rusia zarista.
Contextualización Histórica:
Trece años antes de este hecho histórico ocurrido en Francia; tuvo lugar otro no menos importante y que marcó “un antes y un después” en la Historia, es decir, la llamada “Revolución de las Trece Colonias” contra Gran Bretaña y que culminó con la Independencia de las “Trece Colonias” que dio lugar a la creación de los Estados Unidos, el 4 de julio de 1776 tras un conflicto entre los rebeldes y los británicos.
Francia estuvo del lado de los rebeldes de las “Trece Colonias” por el simple motivo de la posibilidad de poder derrotar a la otra gran potencia del momento como fue Gran Bretaña; ambos países pugnaban por la supremacía del comercio internacional. Además, no podemos olvidar que ambas potencias ya se habían enfrentado en la Guerra de los Siete Años (1756-1763) por el control de América del Norte[1] y no podemos olvidar, que Gran Bretaña ya había mostrado su gran preponderancia tras la Guerra de Sucesión Española (1700-1713) que culminó en la Paz de Utrecht.
Por último, dentro de esta contextualización no podemos olvidar del aspecto ideológico, ya que en el Siglo XVIII tiene lugar la irrupción de la filosofía basada en los conceptos de la Ilustración, que hablaban del uso de la razón así como también abogaban por la libertad del ser humano.
Cuando hablamos de la Independencia de Estados Unidos o la “Revolución de las Trece Colonias” nos vienen a la mente nombres como George, Washington, Thomas Jefferson, Benjamín Franklin; también batallas como la de Saratoga y la Declaración de Independencia de Estados Unidos que inspiró a otros Estados como Francia que promulgó la Carta de los Derechos del Hombre y del Ciudadano que se inspiró en la de los Estados Unidos.
Entre todos estos nombres, figura un militar español al que quizás en España no se le ha dado la relevancia que quizás habría merecido; él es Bernardo de Gálvez, aunque primero debemos intentar comprender ¿Cuál fue el papel de España durante la “Revolución de las Trece Colonias”?
Bernardo de Gálvez fue el Gobernador del Estado de Luisiana durante este periodo y estuvo del costado de George Washington y obtuvo seis victorias en el campo de batalla para los rebeldes. Él pertenecía a una familia que poseía una hidalguía en Málaga y se dedicó a llevar a cabo la carrera militar. Gálvez llegó a América en 1769. Aunque antes de luchar contra los ingleses, se bregó con las tribus apaches que estaban en la zona entre el norte de México y el sur de los actuales Estados Unidos, lo que no pasó desapercibido para nadie fueron sus dotes como militar.
Siendo gobernador de Luisiana su labor se centró en reforzar las defensas de la zona y combatir el contrabando británico. Después se dedicó a convertir la zona su base de las operaciones militares durante la Guerra de Independencia de Estados Unidos.
No olvidemos que en el momento que Estados Unidos presentó su Declaración de Independencia el 4 de julio de 1776, España se había mostrado su neutralidad en el conflicto durante los tres primeros años. En este trienio, Gálvez había decidido pagar con la misma moneda a los ingleses fomentando el contrabando entre los territorios españoles y los rebeldes. Además, se bridó apoyó por parte de España un apoyo encubierto a los ejércitos del General Washington; concretamente, armas, uniformes, bayonetas y elementos básicos de logística. En total, según se comenta la contribución de España fue la siguiente: 136.000 kilos de pólvora, 30.000 operaciones contra los ingleses; entre ellas remontar el Rio Mississippi para ayudar a los rebeldes ganando las batallas que fueran necesarias hasta llegar a Chicago.
Sin embargo, la gran gesta que fue reconocido por el Rey de España y que le valió a Bernardo de Gálvez poder lucir en su escudo de armas la leyenda “Yo Solo” fue durante la batalla de Pensacola cuando atacó desde un pequeño barco un fuerte en solitario y ante la oposición del almirante español, sin embargo, el resto de capitanes se amotinaron obligándole al superior a que ellos fueran en apoyo a Bernardo de Gálvez. Ese acto de heroicidad supuso una victoria estratégica muy importante, ya que España recuperaba Florida y se pudo avanzar hacia Georgetown donde los ingleses se rindieron.
Paralelamente, España fue financiando las diferentes operaciones navales de los franceses para apoyar a los rebeldes, especialmente, la familia Menocal de La Habana que llegó a pagar 600.000 pesos la flota francesa que operaba en Georgetown y desde Veracruz se recaudó un millón para mantener al ejercito de Francia.
Por último, en 2014 el Congreso de Estados Unidos reconoció la labor de Bernardo de Gálvez, ya que hasta el momento la historiografía norteamericana que nace en universidades como Yale y Harvard habían optado por un giro anticatólico y antihispano. A todo ello, hay que incluir que en España no se ha reconocido la figura de Bernardo de Gálvez por parte de la historiografía.
Para más información:
Ollero, Daniel. «La independencia Que Estados Unidos debe a España y de la que Biden habla. .» El Mundo, 1 de Julio de 2022: 44-45.
[1] La película “El Último Mohicano” dirigida por Michael Mann en 1992 refleja muy bien este conflicto con un espectacular Daniel Day Lewis como protagonista y una banda sonora que oro para los oídos.
Cuadro de Portada: “Por España y por el Rey: Gálvez en America” de Augusto Ferrer Dalmau (2015)
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