DIEGO VELAZQUEZ: EL GENIO DE SEVILLA

A lo largo de la Historia, España ha sido cuna de grandes pintores que han abarcado muchos estilos artísticos y sus obras han sido vistas por mucha gente y también elogiadas por los especialistas en Arte.

Uno de los grandes pintores españoles que forman esta pléyade nacional de artistas que han plasmado en sus obras su arte y en algunos casos son testimonios de la Historia. En este caso, queremos hablar acerca del pintor sevillano Diego Velázquez quien en el siglo XVII fue uno de los artistas más reputados de su tiempo.

Contexto Histórico:

Hay que indicar que Diego Velázquez el contexto histórico en que vivió el genial pintor sevillano fue el llamado “Siglo de Oro” donde el arte barroco cogió estaba de moda y en el campo de la pintura fue donde aparecieron otros genios como Ribera, Zurbarán o Murillo. En el campo literario destacan figuras como Miguel de Cervantes, Tirso de Molina, Calderón de la Barca o Luis de Góngora

Por otro lado, en el aspecto puramente histórico nos encontramos en el Reino de los llamados “Austrias Menores” que comprenden los reinados de Felipe III, Felipe IV y Carlos II donde España adquiere las fronteras actuales, mantiene el monopolio de América, pero no podemos olvidar que durante los reinados de los “Austrias Menores” con constantes guerras entre España, Países Bajos y Gran Bretaña. Además, vemos como la economía entra en crisis ya que las actividades agrícolas y económicas como el comercio entra en decadencia ya que no se supieron gestionar bien las riquezas que procedían de América.

Diego Velázquez:

Nació en Sevilla en 1599 y falleció en Madrid 1660. Es contemporáneo de la misma generación de otros grandes artistas como Bernini o Van Dyck y, además, en el campo de la literatura es coetáneo de Calderón de la Barca y Luis de Góngora, al poeta cordobés lo retrató en uno de sus cuadros.

Desde muy joven se interesó por la pintura y su primera etapa como pintor se desarrolló en Sevilla donde conoce a la que será su esposa Juana Pacheco, hija del también pintor sevillano Pacheco quien ejercerá influencia a lo largo de sus obras. Dentro de este periodo en Sevilla, Velázquez pintó obras con temas vulgares, abriendo un claro y centrando el cuadro en una imagen religiosa. Dentro de este periodo nos encontramos obras conocidas como: “La Adoración de los Magos” como ejemplo de esta fascinación por la pintura religiosa propia del barroco español, pero también el realismo del cual bebe el propio Velázquez en obras como “Vieja friendo huevos”.

En 1622, Velázquez comienza a ser conocido en Madrid y el Conde-Duque de Olivares le ofrece pintar a Felipe IV entonces el Rey queda maravillado del retrato que le hace el pintor sevillano y lo nombra pintor de cámara lo que le permite entablar amistad con el Rey, pero también gozar el favor del Conde-Duque a quienes retrata en muchos de sus cuadros. Es durante esta primera etapa en Madrid cuando Velázquez pintó obras como “El Triunfo de Baco” y recibe la recomendación de Rubens de visitar Italia.

El viaje a Italia de Velázquez tiene lugar en 1629 y a partir de aquí el pintor español comienza a abandonar el tenebrismo para profundizar en la luminosidad. En esta época es cuando pinta cuadros tan conocidos como: “La Fragua de Vulcano” o “La Túnica de José”

Tras su estancia en Italia, Velázquez regresa a Madrid para continuar como pintor de cámara y se hace retratista del Rey Felipe IV y del Conde-Duque de Olivares, a quienes retrata en algunos de los retratos más conocidos del genial pintor sevillano. Durante este periodo, vemos en los cuadros de Velázquez la influencia de Rubens donde de resaltan la gravedad de las figuras, la psicología de la expresión y la simbología. En esta época pinta a los bufones y también acompaña a Felipe IV a Aragón durante los conflictos con Catalunya. Además, la Guerra de los Treinta Años sirven como inspiración a Velázquez para pintar uno de sus cuadros más emblemáticos como: “La Rendición de Breda” o “El cuadro de las Lanzas”.

En 1649, Velázquez regresa a Italia donde tiene como objetivo comprar estatuas y cuadros para las galerías de palacio. Durante este periodo el genio sevillano acude a la Santa Sede a pintar al Papa Inocencio X.

Por último, Velázquez vuelve a Madrid a pintar para la corte y donde comenzará a pintar sus obras como “Venus ante el espejo”, “Las Hilanderas” y “Las Meninas” Este último cuadro es muy especial, donde pinta a la Infanta Margarita rodeada de sus damas de compañía, mientras que en el fondo podemos ver a Felipe IV junto a la Reina y también vemos el autorretrato del propio Velázquez pintando el cuadro. Es en esta última etapa cuando Felipe IV le hace entrega de la Cruz de Santiago y el pintor fallece en 1660 en Madrid siendo enterrado con grandes honores.

Para acabar, nos encontramos ante uno de los genios del arte español y tiene muchas otras obras que merecerían estar en este mismo articulo pero no podemos olvidarnos de una obra que para quien suscribe este texto es preciosa: “Cristo Crucificado” El conocido como “Cristo de Velázquez” siendo una de las obras más emblemáticas del genio sevillano donde no se deja ningún detalle en este cuadro pintado en 1632 donde destaca el desnudo del cuerpo, la serenidad, la nobleza y la dignidad de Jesús ya muerto con la mitad de su rostro cubierto por el cabello. Es una obra que cuando la observas en el Museo del Prado parece que estás ante una estatua humana porque es perfecto y es una de las mejores representaciones de Jesús de Nazaret.

Para más información:

Floristán, Alfredo. Hstoria Moderna de España. Barcelona: Ariel. , 2007.

Oposinet. Oposinet. 2019. https://www.oposinet.com/temario-de-geografia-e-historia/temario-5-geografia-e-historia/tema-62-velzquez-y-goya-en-su-contexto-artstico-2/ (último acceso: 28 de Agosto de 2020).

 

 

 

Escribe un comentario

Tu dirección de correo no será publicada.