Según un estudio publicado en la revista Apunts. Educación Física y Deportes, la práctica deportiva constituye un medio esencial en la mejora de la salud física y mental, influyendo en el rendimiento académico.
Además, la cogerente y directora técnica de COLEF Andalucía, Ainara Bernal, afirma que el deporte favorece las relaciones sociales del niño porque le ayuda a “aprender y cumplir normas, valorar el trabajo en equipo, integrarse y asumir responsabilidades”.
La Copa COVAP es una iniciativa educativa y deportiva que vive un momento especial, ya que cuenta con 10 años de trayectoria recorriendo más de 40 localidades para sensibilizar en hábitos saludables a más de 30.000 niños y niñas y alrededor de 60.000 espectadores.
La Copa COVAP, iniciativa educativa y deportiva organizada por la Cooperativa Ganadera del Valle de los Pedroches, pone en valor junto con el Colegio Oficial de Licenciados en Educación Física y en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de Andalucía (COLEF Andalucía), centro colaborador en la décima edición de este proyecto, los beneficios físicos, mentales y sociales del deporte en la infancia. Entre ellos destaca el desarrollo cognitivo, que contribuye a mejorar la atención, la memoria, la concentración y, por ende, el rendimiento académico, tal y como se sostiene en un trabajo de investigación publicado en la revista Apunts. Educación Física y Deportes.
Sin embargo, según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 81% de los niños y niñas con edades comprendidas entre los 11 y los 17 años no ha alcanzado un nivel suficiente de actividad física en la última década. Esto significa que una gran mayoría de niños y adolescentes no dedica la cantidad de tiempo suficiente a hacer ejercicio, por lo que sus capacidades físicas y cognitivas podrían verse mermadas.
Del mismo modo, tampoco conviene olvidar que la magnitud de los efectos que tiene el ejercicio sobre la función cognitiva puede variar de forma significativa según el tipo de actividad realizada. “El ejercicio cardiovascular, por ejemplo, es el que más beneficios reporta a nivel cognitivo para los niños”, asegura la cogerente y directora de COLEF Andalucía, la Dra. Ainara Bernal. Por otro lado, la práctica regular de actividades físicas contribuye ante todo a “mejorar la inteligencia a nivel general y, especialmente, la inteligencia cristalizada, que es aquella asociada con el vocabulario verbal y el conocimiento adquirido de los pequeños”.
El impacto que la actividad física tiene sobre las capacidades cognitivas ha sido el tema central de la sede de la 10ª Copa COVAP celebrada este domingo en Alcalá la Real, donde se han reunido más de 400 niños y niñas en las categorías de fútbol mixto y baloncesto masculino y femenino. Además, la jornada también ha contado con nutricionistas, que han impartido a los familiares una formación didáctica sobre el azúcar, mientras que psicólogos han tratado el uso de tecnologías y redes sociales con los participantes.
Los equipos CB Andújar, tanto de baloncesto femenino como de masculino, y Deportivo Jaén FC de fútbol mixto han ganado en sus categorías y representarán a Jaén en la Fase Final que se celebrará el 17 y 18 de junio en San Fernando.
El deporte, una herramienta para reducir al estrés y la ansiedad
La práctica deportiva produce profundos cambios funcionales y estructurales en el sistema nervioso y en el cerebro. La mayoría de estas alteraciones, según explican desde COLEF Andalucía, se inician a nivel molecular con la liberación de sustancias como respuesta al ejercicio. De hecho, “el ejercicio intenso aumenta la concentración de neurotransmisores como la serotonina, la endorfina, la dopamina, la adrenalina y la noradrenalina”, matiza la Dra. Bernal.
Por ello, el deporte es una buena herramienta para prevenir y gestionar problemas como el estrés o la ansiedad. “Las endorfinas, o moléculas de la felicidad, contribuyen a disminuir los niveles de ansiedad, mientras que la serotonina, por su parte, ayuda a regular el estado de ánimo, y la dopamina se encarga de regular la motivación”, detalla la especialista de COLEF Andalucía. Asimismo, el ejercicio es un recurso que permite la distracción y evasión de las preocupaciones que puedan ser el foco generador de las emociones negativas.
Por último, cabe destacar también que la práctica deportiva refuerza la estabilidad personal y las habilidades sociales de los menores. “Ayuda a asimilar y cumplir normas, valorar el trabajo en equipo, integrarse y asumir responsabilidades, aprender a escuchar, además de reducir la tendencia a desarrollar rasgos agresivos”, concluye la Dra. Ainara Bernal.
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