Palma de Mallorca, 2 de enero de 2024—La Navidad es tiempo de encuentros familiares y con los amigos que por “diversas circunstancias” no puedes verlos a lo largo del año. Las navidades son un periodo en los que recuerdas a los ausentes que descansan en la eternidad y durante estas entrañables fiestas es importante recordar a quienes no están porque a ellos les gustaba mucho celebrarlas.
Es cierto que la navidad se celebra en todos los rincones del mundo donde las casas y las ciudades se engalanan para celebrar las fiestas. Además, es un periodo donde las ciudades y pueblos adquieren una imagen renovada y ganan en belleza.
Aunque la Navidad se conmemora el nacimiento de Jesús de Nazaret en Belén, no podemos olvidar que en la antigua Roma se celebraban las “Saturnalias” donde los romanos intercambiaban regalos, se relajaban las normas sociales y el 25 de diciembre se celebraba la conmemoración del Sol Invictus como final del solsticio de invierno como el nacimiento de un nuevo sol. No será hasta la eclosión del cristianismo cuando esta festividad dejó su lado pagano.
Precisamente, en las casas es tradición poner un abeto decorado con luces y colores que ilumina la navidad. Además, junto al árbol se suele instalar un belén, donde se representa el Nacimiento de Jesús y en este 2023 se ha conmemorado el 800 aniversario del montaje del primer belén en la ciudad de Greccio, situada en la Umbría italiana, por parte de San Francisco de Asís. En Mallorca, es tradición visitar las parroquias, conventos y monasterios para ver los “Betlems” así como por ejemplo darnos un paseo por el belén que instala el Ajuntament de Palma.
En estas entrañables fiestas los niños son los verdaderos protagonistas, ya que estos días tienen vacaciones pero concretamente, las noches del 24 diciembre y 5 de enero deben acostarse más pronto de lo normal porque reciben la visita de Papá Noel y los Reyes Magos; precisamente, no hay que olvidarse de dejar junto a vuestros zapatos en la víspera de Reyes una copa de champán, unas galletas y fruta para los camellos; ya que ellos viajan por todo el mundo y así pueden descansar después de dejarnos los regalos.
En la Nochebuena, en Mallorca la tradición nos invita a pasarla en familia donde solemos cenar con los nuestros y después se acude la Misa del Gallo (o Matines) donde tiene lugar el canto profético de la Sibila; cuyo origen nos traslada a la Edad Media y se canta en las iglesias de Mallorca pero también en Cerdeña, concretamente, en l’Alghero. Después de la Misa del Gallo se suele tomar una ensaimada acompañada por una taza de chocolate caliente. En el día de Navidad, el 25 de diciembre, las familias se vuelven a juntar para degustar sopa rellena con caldito bien caliente y de segundo un plato de lechona o porcella. Tanto las Islas Baleares como en Catalunya es tradición celebrar también la Segona Festa o comida de San Esteban.
El día 28 de diciembre, en Mallorca es costumbre celebrar la Festividad de los Santos Inocentes… donde todo el mundo está sujeto a las posibles bromas que su entorno les puede realizar. En la vecina Menorca no se suele celebrar esta festividad el 1 de abril siguiendo la tradición británica, no olvidemos que Menorca desde el siglo XVIII hasta principios del siglo XIX estuvo bajo la bandera de Gran Bretaña.
El Fin de Año en Mallorca tiene un simbolismo muy especial, ya que por un lado la tradición como la Historia se unen en uno solo, se celebra “La Festa de l’Estandart” que conmemora la consquista de Mallorca por el Rey Jaime I de Aragón, el monarca entraba en Medina Mayurka el 31 de diciembre de 1229. Es una de las fiestas de carácter civil más antigua de Europa. Mientras que celebración de la Nochevieja se celebra en familia vistiendo las mejores galas, tras el brindis y las campanadas que anuncian el año nuevo, se suele celebrar una fiesta hasta la mañana siguiente.
Mientras que el Día de Año Nuevo, es costumbre comer en familia y muy tarde porque la resaca de la noche anterior puede ser importante. Además, es tradición escuchar los diferentes Conciertos de Año Nuevo, especialmente, el de la Orquesta Filarmónica de Viena que interpreta los vals de Johan Strauss como por ejemplo el famoso “Danubio Azul” o “La Marcha Radetzky” que interpretan en la majestuosa Sala Dorada de la capital austriaca.
Por último, llega el día más esperado para los pequeños y mayores, el 5 de enero por la tarde llegan Sus Majestades los Reyes Magos quienes durante la noche del 5 al 6 de enero se dirigen acompañados por su sequito a las casas de todo el mundo para dejar los regalos que la gente les ha escrito en sus cartas. Eso sí, no olvidéis colocar junto al árbol de Navidad y el belén vuestros zapatos, un plato de comida, un poco de bebida y dátiles para los camellos.
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